Karel Vacek revive en el Gran Sasso d’Italia. El corredor que ganaba a Remco Evenepoel.
El ciclismo está lleno de pequeñas historias que siempre es bueno guardarlas y recordarlas con el paso del tiempo. Y la de ayer de Karel Vacek es una de ellas.
El checo, de 22 años, ayer estuvo escapado casi 210 kilómetros junto a Davide Bais y Simone Petilli. Entre ellos se jugaron el triunfo en la mítica subida del Gran Sasso d’Italia, aunque para el grupo de favoritos no lo fue, se fumaron la subida, pero esa es otra historia.
Karel Vacek se retorcía sobre la bicicleta en los tres últimos kilómetros para no perder la estela de sus compañeros, aunque la perdió en varias ocasiones, pero sacó fuerzas de donde no las tenía para conectar de nuevo, e incluso, atacar en los últimos metros. Pero hubiera sido demasiado épico que ganara. Davide Bais se llevó el triunfo, pero Karel Vacek, también ganó.
El checo cruzó la línea de meta haciendo el gesto de rezar o dando las gracias por aquel segundo puesto que sabía a victoria.
Seguro que a muchos les sorprendió ese gesto, pero tiene una historia detrás, una de esas pequeñas historias que quizás pasarán desapercibidas.
Para empezar, Karel Vacek fichó este año por el Team Corraltec, su primer equipo ProTour, aunque en 2021 ya estuvo enrollado en un equipo WT, el Team Qhubeka ASSOS, donde saltó a profesionales con 19 años. Ya sabemos qué pasó con el equipo y como Vacek se tuvo que buscar la vida en el Tirol KTM Cycling Team continental.
Por ello, 2023 era como un nuevo inicio, pues cuenta el corredor checo: «Estuve en un bajón durante cuatro o cinco años y hasta quería dejar el ciclismo. Así que este segundo lugar es muy bueno para mí».
Después de esas declaraciones se puede entender que diera gracias por ese segundo puesto que le supo a victoria.
Pero hay más.
Karel Vacek, ni siquiera tenía en su calendario disputar el Giro de Italia de este año, pero al final, los planes del equipo italiano lo llevaron a enrollarse para disputar su primera Gran Vuelta. Todo un reto y más si tenemos en cuenta que el Team Corraltec no contaba con un líder para el que trabajar y que, en principio, se deberían pelear todos los días para estar en las escapadas.
Sería bueno apuntar que el año, no estaba siendo bueno, ningún TOP20, aunque las sensaciones generales del corredor es que tenía más regularidad en su desempeño.
Nos tenemos que remontar al año 2018 para poner una guinda más a la historia de la plegaria de Karel Vacek. Y es que en aquel año, siendo juvenil, le ganó en tres ocasiones a Remco Evenepoel, un hecho bastante extraordinario que ahora os intentaré explicar.
La primera fue en la tercera etapa de la prestigiosa carrera de categoría juvenil, Course de la Paix Juniors. Llegaron escapados Antonio Tiberi, Remco Evenepoel y Karel Vacek y el checo se llevó el sprint. El belga se llevaría la general.
La segunda fue en el segundo sector de la primera etapa del Giro della Lunigiana. Fue una cronoescalada de 3,5 km donde el checo ganó por 1” al belga.
Luego, le volvió a ganar en la misma carrera, esta vez en la tercera etapa. Fue una etapa con final en Casette di Massa donde se subían 2,9 km al 8,5% para finalizar la etapa.
Al día siguiente, Vacek se dejaría 9 minutos, aunque estaba lejos ya en la general y Remco Evenepoel, de nuevo, se haría con la general.
Tres victorias en tres escenarios distintos que denotan las buenas características de Karel Vacek. Y no podemos olvidar que el Remco Evenepoel de 2018 de 27 días de competición que realizó, ganó en 18, en cinco hizo segundo y un tercero, a lo que hay que sumar 5 clasificaciones generales, vaya, los cinco que disputó. Era casi invencible y Vacek lo pudo vencer en tres ocasiones, por eso el apunte de extraordinario.
También podemos apuntar que Evenepoel llegó fuera de control en la Paris – Roubaix Juniors de ese año, donde ganó el corredor, ahora del FDJ, Lewis Askey y donde hizo sexto Carlos Rodríguez.
Acabo esta pequeña historia con unas declaraciones del ciclista en una entrevista al final de la etapa de ayer, donde comentó: «Quiero vivir como un verdadero profesional, esto es un sueño hecho realidad. Todavía no puedo creer lo que hice hoy».
Espero que este sea el reinicio de los buenos momentos sobre la bicicleta de un corredor, de solo 22 años, y que tenía un futuro muy prometedor delante, y que cambie el tenía por el tiene.